Luis Sánchez, de 25 años, salió de la cárcel del condado de Harris el pasado jueves 21vde septiembre del 2023 , tres meses después de su arresto por un cargo de delito grave de agresión sexual a un niño.
Un hombre de Texas acusado de drogar, violar y dejar embarazada a una joven de 16 años fue liberado de la cárcel con una fianza de un dólar, después de que los fiscales no cumplieran el plazo para acusarlo por dos días.
Luis Sánchez, de 25 años, salió de la cárcel del condado de Harris el pasado jueves 21vde septiembre del 2023 , tres meses después de su arresto por un cargo de delito grave de agresión sexual a un niño.
En Texas, los fiscales deben obtener una acusación dentro de los 90 días posteriores a la detención del sospechoso.
Si la acusación no se obtiene de un gran jurado dentro del tiempo asignado, por ley se debe otorgar al acusado “una fianza de reconocimiento personal o razonable”.
Dado que Sánchez figuraba en los registros judiciales como indigente, un juez aceptó la petición de su abogado de reducir el monto de su fianza a 1 dólar esta semana.
La madre de la presunta víctima de violación criticó la liberación bajo fianza de Sánchez como “un atroz error judicial” en una entrevista con ABC13 , durante la cual le alteraron la voz para proteger a su familia.
En abril de 2022, Sánchez invitó a la adolescente y a sus hermanos a su casa en Houston Heights para jugar. Durante la visita, supuestamente le dió al joven de 16 años un trago de vodka Smirnoff, según registros judiciales citados por la emisora Fox 26.
Luego supuestamente envió a los hermanos de la niña de regreso a casa, pero les dijo que ella podía pasar la noche en su casa.
La presunta violación resultó en el embarazo y una prueba de ADN confirmó que Sánchez era el padre biológico del bebé de la niña.
Sánchez fue arrestado en mayo del 2023 , más de un año después de la presunta violación. Fue liberado de la cárcel el pasado jueves 21 de septiembre del 2023 por la tarde con un monitor de tobillo y puesto bajo arresto domiciliario en un refugio.
Pero la madre de la presunta víctima dijo que creía que las condiciones de la liberación de Sánchez eran insuficientes para mantener al público a salvo de él.
“Dios no lo quiera, si se quitara el monitor de tobillo, desaparecería en un instante”, dijo.