Manfred Genditzki, actualmente de 64 años de edad, fue condenado a cadena perpetua en 2010 acusado de haber matado a una mujer de 87 años de edad.
A un hombre que permaneció encarcelado por más de una década en Alemania por un delito que no cometió, le han solicitado que pague por los gastos de su alimentación y su estancia mientras estuvo en prisión.
Manfred Genditzki, actualmente de 64 años de edad, fue condenado a cadena perpetua en 2010 acusado de haber matado a una mujer de 87 años de edad.
No fue hasta 2023 que el Tribunal Regional I de Múnich decidió absolver a Genditzki tras demostrarse su inocencia.
En el veredicto, el presidente de la corte mencionó que hubo una “acumulación de errores” en el caso.
En ese mismo año (2023), Genditzki recibió una indemnización de 368.700 euros (alrededor de 384.000 dólares) por el tiempo que estuvo preso injustamente.
No obstante, a finales del pasado mes de noviembre del 2024 , exigió al estado federado de Baviera una compensación adicional de unos 780.000 dólares.
Pagar una gran factura
No obstante, recientemente, la Fiscalía de Múnich explicó que Genditzki debe pagar una “compensación de prestaciones” por un monto aproximado de 104.000 dólares.
Según la institución, la suma incluye los gastos de “alojamiento y comida” durante su encarcelamiento, estimados en 50.442,48 euros (52.500 dólares), y los salarios percibidos por el trabajo en prisión, por un total de 48.979,06 euros (51.000 dólares).
“Eso es horrible“, señaló Genditzki en referencia al pago exigido por la Fiscalía de Múnich. “El primer día te dan platos de plástico, una lata de pescado y dos rebanadas de pan, ¿y tengo que pagar por eso?”, cuestionó.
Por su parte, la abogada del afectado calificó como “una barbaridad” la situación. “En otros países, alguien que fue encarcelado injustamente sería compensado con millones en acuerdos”, añadió. Sin embargo, un juez explicó a la prensa local que el procedimiento de compensación de prestaciones en Alemania es “común, habitual y legal”.
El exministro de Justicia alemán, Marco Buschmann, estaba planeando abolir dicha práctica antes de dejar su cargo el pasado noviembre del 2024.
Algunos medios sugieren que el cobro enviado por la Fiscalía de Múnich fue en represalia por la demanda interpuesta por Genditzki para obtener una indemnización adicional.