Prakash Hinduja, de 78 años, y su esposa Kamal han sido sentenciados a entre cuatro y cuatro años y medio de prisión cada uno, mientras que su hijo Ajay y su nuera Namrata lo fueron a cuatro años de cárcel cada uno.
Un tribunal penal de Suiza ha declarado culpables a cuatro miembros de la familia más rica del Reino Unido por explotar a sus empleados domésticos y proporcionar empleo no autorizado, informó el pasado 21 de junio del 2024 el diario británico The Telegraph.
Prakash Hinduja, de 78 años, y su esposa Kamal han sido sentenciados a entre cuatro y cuatro años y medio de prisión cada uno, mientras que su hijo Ajay y su nuera Namrata lo fueron a cuatro años de cárcel cada uno.
A su vez, un quinto acusado, el director comercial de la familia, Najib Ziazi, recibió una sentencia suspendida de 18 meses.
Además de las penas de prisión, la familia deberá pagar 850.000 francos suizos (unos 951.270 dólares) en concepto de indemnización y 270.000 francos suizos (302.127 dólares) por honorarios judiciales.
Las autoridades suizas habían confiscado con antelación a los Hinduja joyas de alto valor, incluidos diamantes, rubíes y un collar de platino, con el fin de ser utilizados para los posibles gastos.
Ninguno de los acusados estuvo presente en el tribunal, justificando su ausencia con los problemas de salud de Kamal Hinduja.
Su abogado, Romain Jordan, afirmó que la mujer está gravemente enferma y que sus familiares tenían que estar junto a su cama.
“Un clima de miedo”
Durante el juicio, los fiscales revelaron que a las personas que trabajaban en la villa suiza de los Hinduja —en su mayoría indios analfabetos— se les confiscaban los pasaportes, se les pagaba en rupias y no se les permitía salir de casa sin autorización.
Asimismo, los empleados eran obligados a trabajar jornadas extremadamente largas por salarios muy bajos.
El salario de algunos de ellos equivalía a menos del 10 % de la cantidad estipulada por la legislación suiza y los trabajadores disponían de poco o de ningún tiempo libre.
A una mujer presuntamente se le llegó a pagar tan solo siete francos suizos (unos 7,8 dólares) por trabajar hasta 18 horas al día, siete días a la semana.
Además, los miembros del personal supuestamente dormían en el sótano de la villa, a veces en un colchón sobre el suelo.
A las autoridades también les llamó la atención el hecho de que sus patrones gastaran más dinero al año en su perro que en ellos.
“Ellos [los trabajadores] fueron explotados debido a que su situación en la India era muy precaria y fueron explotados porque no conocían el idioma, les confiscaron sus pasaportes y solo eran pagados cada tres a seis meses”, dijo la juez Sabina Mascotto, mientras los fiscales acusaron a los Hinduja de crear “un clima de miedo“.
Acusaciones “excesivas”
Por su parte, el abogado de los Hinduja calificó tales afirmaciones de “excesivas” y acusó a la Fiscalía de “sesgo inaceptable“. “Ninguna otra familia habría sido tratada de esta manera”, sostuvo, remarcando que sus clientes “han sido absueltos de todos los cargos de trata de personas”.
Según el letrado, la decisión judicial por el resto de los cargos será apelada. “Al contrario de lo que informan algunos medios de comunicación, no existe una detención efectiva para ningún miembro de la familia“, dijo.
“Cabe recordar también que los demandantes en este caso habían retirado sus respectivas denuncias tras declarar ante el tribunal que nunca habían tenido la intención de participar en dicho proceso”, destacó Jordan.