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Dos hombres, identificados como Gerardo Portillo y Manuel Reyes , fueron arrestados en la alcaldía de Iztapalapa (México) por realizar un ritual de brujería en un cementerio, que supuestamente les ayudaría a terminar con sus vecinos molestos, informaron ayer viernes 5 de julio del 2024 medios locales.

La Secretaría de Seguridad Ciudadana comunicó sobre el incidente a principios de esta semana, sin proporcionar detalles de la apertura de la tumba.

Posteriormente, algunos diarios revelaron que el ritual consistía en abrir una tumba y enterrar junto al cadáver varios frascos con miel, alcohol y amoniaco. Según informes, fueron convencidos por un individuo de origen haitiano, a quien pagaron 4.000 dólares, para realizar un ritual con el objetivo de deshacerse de sus vecinos indeseables.

En las imágenes compartidas por el periodista Carlos Jiménez se pueden observar los frascos que los sujetos habrían colocado en la tumba.

Sin embargo, la Policía logró detenerlos antes de que pudieran llevar a cabo su plan. El guardia del cementerio fue quien alertó a las autoridades.

De acuerdo con el Artículo 280 Fracción III del Código Penal Federal, citado por la prensa local, aquella persona que exhume un cadáver sin los requisitos legales o con violación de derechos, se le impondrá una pena de dos a tres años de prisión, así como una multa económica. Mientras que el Artículo 281 Fracción I indica una pena de uno a cinco años de cárcel a quien viole un túmulo, un sepulcro o un féretro.

Por Redacción Cuaima Team

Redacción CuaimaTeam

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