En algún momento antes del Día de Acción de Gracias del 2023, Ian Pritchard contrajo blastomicosis, una enfermedad transmitida por hongos que atacó y desgastó su sistema respiratorio.
Un chef de 29 años del estado de Michigan, Estados Unidos,, murió la semana pasada después de luchar contra una rata enfermedad fúngica que devastó sus pulmones.
En algún momento antes del Día de Acción de Gracias del 2023, Ian Pritchard contrajo blastomicosis, una enfermedad transmitida por hongos que atacó y desgastó su sistema respiratorio.
“Nos mostraron una imagen de sus pulmones y literalmente parecían queso suizo”, dijo su padre, Ron Pritchard, a UpNorthLive en diciembre del 2023.
A Pritchard le retiraron el soporte vital el pasado sábado 3 de febrero del 2024 en un hospital de Detroit, según una página de GoFundMe que recaudó casi 20.000 dólares para su familia .
“La infección por hongos blastomicosis devastó los pulmones de Ian sin posibilidad de reparación”, decía la página
En personas con sistemas inmunológicos debilitados, la infección se propagará desde los pulmones al sistema nervioso central junto con la piel y las articulaciones, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades .
Una investigación de 2005 encontró que entre el 4% y el 22% de las personas infectadas mueren a causa de blastomicosis .
Las personas contraen la enfermedad al respirar esporas del hongo blastomyces, que vive en suelos húmedos y en madera y hojas en descomposición que se encuentran en el Medio Oeste y el Sur de Estados Unidos.
“Está en el aire, en los árboles, en las hojas mojadas, en el suelo, en el barro, en todas partes. Todo el norte de Michigan (de hecho, el Medio Oeste) está cubierto de [blastomyces]”, advirtió Pritchard.
La infección suele desarrollarse en un plazo de dos a 15 semanas.
Aproximadamente la mitad de los pacientes sufrirán síntomas como fiebre, tos, dificultad para respirar y dolores musculares.
Si bien no existe cura, la enfermedad se trata con medicamentos antimicóticos como el itraconazol. Pritchard dijo que los medicamentos de su hijo cuestan alrededor de 7,000 dólares mensuales.
la familia Pritchard está conmocionada por su repentina pérdida.
“Era un buen chico. No se metió en muchos problemas, no fue difícil criarlo”, añadió el afligido padre. “La gente ama su comida, la gente lo ama a él”.
