El pasado viernes 8 de marzo del 2024, dos bandas de narcos se enfrentaron a tiros en plena autopista de Jerez de la Frontera-Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), España
La impunidad de los narcotraficantes en Andalucía está superando cotas nunca vistas en el sur de España.
El pasado viernes 8 de marzo del 2024, dos bandas de narcos se enfrentaron a tiros en plena autopista de Jerez de la Frontera-Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), España
Según fuentes policiales, todo comenzó con un altercado registrado el mismo viernes 8 de marzo del 2024 por la tarde, cuando una de las bandas quiso robarle a la otra la mercancía de hachís que portaba.
Así lo ha indicado ayer sábado 9 de marzo del 2024 un portavoz de la Policía Nacional de España que ha detallado que el aviso de este suceso fue recibido alrededor de las 06:30 pm (hora local) de este pasado viernes 8 de marzo del 2024.
Al acudir al lugar, los agentes de la Policía encontraron dos vehículos, un turismo y una camioneta que tenía una rueda pinchada por un disparo y en su interior almacenaba cerca de una treintena de fardos de hachís, según ha explicado la misma fuente.
Actualmente, los agentes de la Policía Nacional están investigando para encontrar a los implicados en el altercado, ya que no hay ningún sospechoso ni detenidos hasta el momento tras este suceso.
Advertencia de Jucil
La asociación profesional Justicia para la Guardia Civil (Jucil) ha criticado ayer sábado 9 de marzo del 2024 que, “un mes después del asesinato de dos guardias civiles” en el puerto de Barbate (Cádiz) arrollados por una narcolancha, “nada ha cambiado; el narco aún campa por la costa andaluza y asalta cuarteles”.
Así lo ha denunciado la asociación profesional de guardias civiles en una nota en la que, además, ha lamentado que hasta ahora “ningún grupo político parlamentario ha tomado la bandera de proponer una comisión de investigación que determine en el Parlamento las responsabilidades políticas por la inacción que se observa frente al avance de las mafias que controlan el paso de estupefacientes y de inmigrantes sin permiso desde África”.
El secretario general de Jucil, Ernesto Vilariño, ha aseverado que “no se debe permitir que algunas formaciones políticas pretendan normalizar el cruel asesinato de los guardias civiles escudándose en que se trató de un accidente laboral”.
“Ha pasado un mes desde el asesinato de nuestros compañeros David Pérez y Miguel Ángel González a manos de unos narcotraficantes que arrollaron con su lancha rápida la pequeña embarcación en la que estos guardias civiles y otros cuatro compañeros intentaban identificarles en el puerto de Barbate”. “Un mes y nada ha cambiado”, ha criticado Ernesto Vilariño.
El secretario general de Jucil ha agregado en esa línea que “ni el ministro del Interior, ni el director general de la Guardia Civil han tenido la más mínima intención, no ya de dimitir, que vemos que ni por esas, al menos la intención de hacer algo, de reforzar, promover, avanzar y liderar la lucha contra el narcotráfico y el tráfico de inmigrantes en el Estrecho de Gibraltar”.